Casi sin darnos cuenta se nos acaba el año. Hoy es el 1º domingo de Adviento, que es cuando en mi casa empezaba a oler a navidad, hablo de cuando era pequeña, aunque yo he seguido esa costumbre. Desde hace unos años preparo la corona y las cuatro velas, cada domingo enciendo una, ayer buscando por la red, leí que cada vela significa una cosa, así la primera se enciende por el amor, la segunda por la paz, la tercera por la tolerancia y la cuarta por la fe, me gustó y lo comparto. Cuando hoy encienda la primera vela pediré porque el amor rodee a nuestro planeta, a lo mejor aún estamos a tiempo de acabar con tanta locura. Soy amante de la paz, de la tolerancia y de la fe, aunque esta última se me tambalea un poco, tal como está todo, pero pediré porque no la pierda, que entonces me iría peor.
Me gustan estas fiestas, pero tal como eran antes, no soporto en lo que se han convertido, una carrera a ver quién compra y gasta más, aunque tal como está la cosa, no creo que se despilfarre tanto como otros años.
Ando sin ganas de estar por aquí, no es que me ocurra nada, es que mientras no se pase el cable, yo sigo con problemas, a través de la wifi, unas veces esto camina, y otra va a paso de tortuga, y lo siento pero se me quitan las ganas. A lo mejor sin querer me estoy desenganchando del ordenador, eso si, no me olvido de ninguno.
Mis mejores deseos en este tiempo de adviento para todos, y que lo que leí sobre las cuatro velas se haga realidad para todos los habitantes de nuestro mundo. Amor, paz, tolerancia y fe para todos, y como siempre, sean felices.