Luz, Haití y algo de mí.

La semana se me ha pasado en un suspiro, y no es que haya estado de fiesta, todo lo contrario, pero tengo la impresión de que los días vuelan.

Actualizo más que nada para que sepan que sigo por aquí aunque no esté mucho, sigo pachucha, nada grave, pero si latoso.

Todos los días tenemos noticias que nos impactan, unas más que otras, a mí, esta semana me dejo mal el que Luz Casal tenga que pasar de nuevo por el quirófano, (ya pasó) de verdad que lo siento mucho, últimamente estaba radiante con su último disco, La pasión. De todo corazón le deseo una pronta mejoría, es una mujer luchadora y saldrá adelante, aparte, seremos muchos los que le estaremos enviado nuestros mejores deseos de salud, para verla lo antes posible cantando de nuevo. Me hubiese gustado poner música de ella, pero ando con la pena de no poder cambiar el reproductor, ni la música, deja ver si por fin encuentro tiempo para ponerme de acuerdo con la persona que me puede ayudar a cambiarlo.

Otra cosa, escuché en la radio el comentario que hizo Isabel Gemio a su vuelta de Haití. Al parecer todo sigue igual, lleno de escombros, las ayudas no llegan, o son retenidas, comentó que en el tiempo que estuvo allí, sólo vio una excavadora, que las únicas casetas de madera o plástico que se han hecho, ha sido por Mensajeros de la paz. Las personas de allí le pedían que dijera que no nos olvidáramos de ellos, y eso es lo que hago, hacerme eco de su voz y repetir que Haití nos necesita a todos. Otro motivo más para sentir vergüenza ajena, se gastan millones en disparates, y a esta pobre gente le acechan terribles enfermedades como la malaria y el cólera, si la situación no se arregla pronto. Sigo sin entender nada de lo que ocurre en este mundo.

Mi amiga Flor me puso el reproductor, quedamos en que me explicará con calma los cambios, desde aquí le doy mis más sinceras gracias.