Felices Reyes

Hace días que no aparezco, pero en esta noche mágica, ya saben que siempre vengo a desearles felices reyes. Espero a partir de mañana incorporarme de la forma habitual.

He tenido problemillas de la mano, y la he dejado descansar para poder terminar unas camisetas.

Hoy empecé el día, como siempre con la radio, en ella hoy, las personas de mi edad contaban como fueron sus noches de reyes, ya saben que si algo me gusta corro a comentarlo, y lo que escuché esta mañana, me pareció tan hermoso, que aunque me costó una llorona, lo quiero contar. Una señora de edad parecida a la mía contó que eran seis hermanos, su padre murió cuando ella contaba nueve meses de vida, su madre tuvo que trabajar mucho para que no les faltase la comida, vivían con toda ilusión esta noche tan linda, ella era la más pequeña y recuerda que con apenas cuatro años, su madre los mandó a la cama temprano, después de ver la cabalgata, ya saben que esa noche no se puede abrir los ojos, se escuche lo que se escuche, a los reyes no les gusta la gente que tiene insomnio, dice que sintió como que mariposas le pasaban por la cara, pero no abrió sus ojitos, cuando se despertaron, vieron con felicidad que todos tenían las caras pintadas, cada uno de un color distinto y lindas estrellas de purpurina brillaban en sus mejillas, se levantaron como locos, muertos de risa, y vieron como el suelo estaba lleno de caramelos y confetis, eran tantos que sus manitas no podían abarcarlos, ese fue su regalo de reyes, y ella decía, que jamás fue tan feliz como aquella noche. Salieron a la calle con los bolsillos repletos de caramelos para repartirlos entre los demás niños, comentó que las niñas ricas que llevaban la Mariquita Pérez que ella nunca tuvo (yo tampoco) no la dejaban tocarla, pero que ella si que le dio caramelos. Amigos eso es felicidad, lo demás son cuentos chinos.

Esta historia es una de las más hermosas que escuché, pienso en esa madre, cansada, y con manos livianas pese a todo, pintado las caritas de sus hijos, hay cosas que nunca, nunca podrá dar el dinero.

Felices Reyes a todos, hoy voy justa de tiempo para la cabalgata, pero esta historia vale el retraso. Besitos y dulces sueños, no olviden la magia de esta noche nunca.